En Estados Unidos, el senador del estado de Maryland Chris Van Hollen confirmó el jueves por la noche que se reunió con Kilmar Abrego García, el padre de familia de Maryland que el mes pasado fue trasladado a la fuerza a una megacárcel de El Salvador en un hecho que el Gobierno de Trump reconoció como un “error administrativo”. Van Hollen compartió una foto en la que aparece junto a Abrego García, ambos sentados a una mesa en lo que parece ser el restaurante de un hotel. El senador estadounidense viajó el miércoles a El Salvador para presionar por la liberación de Abrego García, pero inicialmente se le impidió tener cualquier contacto con él. La esposa de Abrego García, Jennifer, celebró el encuentro y dijo en un comunicado: “Mis oraciones y las de mis hijos han sido escuchadas”.
Mientras tanto, en respuesta a la reunión de Van Hollen con Abrego García, el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, dijo en redes sociales: “Ahora que se ha confirmado que está sano, [Abrego García] tiene el honor de permanecer bajo la custodia de El Salvador”. Bukele también escribió: “¡Kilmar Abrego García, milagrosamente resucitado de los 'campos de exterminio' y la 'tortura', ahora bebe margaritas con el senador Van Hollen en el paraíso tropical de El Salvador!”.
Abrego García vivió en Maryland durante casi 15 años, tras huir de la violencia de grupos criminales en El Salvador, y estaba trabajando como aprendiz de metalúrgico.
Mientras tanto, un tribunal federal de apelaciones falló que el Gobierno de Trump debe acatar la orden de una jueza que exige que funcionarios gubernamentales respondan a interrogatorios en relación con el caso de Kilmar Abrego García. Dicha jueza, Paula Xinis, está evaluando iniciar un proceso de desacato al tribunal contra los funcionarios de Trump. En el fallo unánime del jueves, el juez del Tribunal de Apelaciones del Cuarto Circuito Harvie Wilkinson, quien fue designado por el expresidente Ronald Reagan, calificó las acciones del Gobierno de Trump como “impactantes” y escribió al respecto: “El Gobierno está reivindicando el derecho a recluir a residentes de este país en cárceles extranjeras sin seguir el debido proceso, que es la base de nuestro orden constitucional”.