Los líderes del G7, incluido el presidente Trump, firmaron una declaración en la que piden una “desescalada de las hostilidades en Medio Oriente”, al tiempo que ratifican el derecho de Israel a defenderse, a pesar de que ese país lanzó el primer ataque no provocado contra Irán.
Trump abandonó un día antes la cumbre del G7, que se está celebrando en la provincia de Alberta, Canadá. En su vuelo de regreso a Washington D.C., Trump dijo a la prensa que busca un “fin real” del conflicto, no un alto el fuego. El mandatario estadounidense afirmó al respecto: “Irán no puede tener armas nucleares. Es así de simple”. Trump también criticó al presidente de Francia, Emmanuel Macron, que afirmó que el presidente estadounidense había abandonado de manera anticipada el G7 para negociar un alto el fuego.
Mientras tanto, la agencia de noticias Reuters informa que Estados Unidos ha enviado a Europa una gran cantidad de aviones de reabastecimiento de combustible de la Fuerza Aérea estadounidense. Asimismo, el portaaviones estadounidense Nimitz se está dirigiendo a Medio Oriente.
El lunes, el senador demócrata Tim Kaine presentó una resolución de poderes de guerra para exigir que Trump obtenga la autorización del Congreso antes de atacar Irán.