Las autoridades sanitarias de Gaza afirman que una serie de ataques israelíes ha matado al menos a 21 personas desde el amanecer, al tiempo que una intensa ola de calor agrava el sufrimiento de los palestinos, que siguen muriendo de hambre debido al bloqueo que Israel está llevando a cabo en la Franja. Entre los muertos se encuentra un niño palestino de un año y medio que murió cuando un ataque israelí impactó en una tienda de campaña de la ciudad de Gaza. Varios familiares del menor resultaron heridos. La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios advierte que el estado nutricional de los niños y niñas de Gaza continúa deteriorándose debido al asedio israelí. Según un registro, aproximadamente 13.000 menores fueron internados en julio por desnutrición.
El jueves, el servicio de emergencias del hospital Nasser de Gaza se inundó con aguas residuales sin tratar después de que un ataque israelí dañara una infraestructura cercana. El director del hospital dijo que las fuerzas armadas israelíes estaban bloqueando las labores de reparación del sistema de alcantarillado que resultó dañado.
Doctor Atef Al-Hout: “El problema no está dentro del hospital Nasser. El problema está afuera, pero se encuentra en un área conocida como “zona roja” a la que el municipio, o cualquier otra institución, no puede acceder sin antes coordinar con las fuerzas de ocupación israelí. Para poder resolver este problema, la coordinación demora 72 horas, según nos han dicho. La situación es trágica, y no podemos permitirnos 72 horas. El hospital colapsará”.