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Un domingo hace seis meses las autoridades egipcias allanaron la habitación de un hotel en El Cairo donde se alojaban los periodistas de la red de televisión global Al Jazeera. El 29 de diciembre Peter Greste, Mohamed Fahmy y Baher Mohamed fueron detenidos y desde entonces están la cárcel. La semana pasada fueron condenados a pasar entre siete y diez años en la cárcel por la supuesta “difusión de noticias falsas” en apoyo a la agrupación Hermanos Musulmanes, considerada por el gobierno de ese país como un “grupo terrorista”. La condena asombró a los periodistas y a quienes apoyan la libertad de prensa en todo el mundo. Los periodistas de Al Jazeera no están solos. De acuerdo al Comité para la Protección de los Periodistas, actualmente hay otros once periodistas encarcelados en Egipto. Nos acompaña Salah Negm, director de noticas de Al Jazeera en inglés. “Estábamos informando desde Egipto de manera objetiva y precisa”, afirma Negm. “A lo largo de todo el juicio no hubo ni una sola prueba contra ellos de falsificación de la información ni de que hubieran estado apoyando a un grupo proscripto. Eso era totalmente falso. La condena causó verdadera sorpresa”.
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