En la República Democrática del Congo, al menos 19 personas murieron el domingo en un ataque atribuido al grupo rebelde denominado las Fuerzas Democráticas Aliadas. Las muertes se produjeron en la localidad oriental de Kirindera, en la provincia de Kivu del Norte. Esto ocurre solo unos días después de que al menos 36 personas murieran en un ataque similar que se produjo en la misma región. Estas fueron las palabras expresadas por una persona que sobrevivió al ataque.
Jerry Paluku Mafuta Mingi: “La situación [que vivimos] aquí es catastrófica debido al ataque y a los daños [que éste dejó]. Muchas personas murieron luego de que les cortaran la garganta. Sus casas fueron quemadas. Y aquí en el hospital, aquí donde estamos parados, [los rebeldes] quemaron hasta los medicamentos y todo el material del hospital”.
La ONU advierte sobre un creciente desastre humanitario en la República Democrática del Congo, al tiempo que unas 300.000 personas huyeron en febrero de la ola de violencia que azota la provincia de Kivu del Norte. Estas fueron las palabras expresadas por un portavoz de la Agencia de la ONU para los Refugiados.
Mateo Saltmarsh: “Los equipos de la Agencia de la ONU para los Refugiados informaron de terribles testimonios de violaciones de los derechos humanos en las zonas afectadas, especialmente en los territorios de Rutshuru y Masisi, que incluyen asesinatos arbitrarios, secuestros, extorsiones y violaciones”.
Los pedidos para que el presidente de Ruanda, Paul Kagame, deje de apoyar a los rebeldes del grupo M23, cuyos ataques han provocado el desplazamiento de más de medio millón de personas, se han incrementado, aunque Ruanda ha negado todo tipo de participación en los ataques.
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