La congresista demócrata del estado de Nueva Jersey LaMonica McIver se declaró el miércoles “no culpable” de los cargos de agredir a un agente de inmigración durante una visita oficial que realizó en mayo a una cárcel para inmigrantes situada en la ciudad de Newark. Los cargos se derivan de un incidente ocurrido el 9 de mayo en el que McIver y otros dos congresistas demócratas intentaron recorrer Delaney Hall, una prisión privada gestionada por el GEO Group bajo un contrato establecido con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos. Una denuncia penal presentada por la exabogada personal del presidente Trump Alina Habba, quien actualmente se desempeña como fiscal federal interina en el estado de Nueva Jersey, acusa a la congresista McIver de golpear a un agente federal con el antebrazo y agarrarlo “por la fuerza”, y de pegarle a otro agente. McIver, quien insiste en que fue ella a quien los agentes federales que se encontraban en el lugar maltrataron, habló con sus simpatizantes tras comparecer el miércoles en un tribunal federal de Newark.
Congresista LaMonica McIver: “Todo esto tiene que ver con la intimidación política. El Gobierno de Trump y, como saben, él y sus colegas o secuaces, como quieran llamarlos, han convertido el Gobierno federal en un arma. […] Los hechos demuestran nuestro argumento. No importa cuál sea el titular sobre el que escriban en redes sociales, no importa lo que hagan en su Twitter, sabemos que los hechos respaldan mi argumento”.
El alcalde de Newark, Ras Baraka, también fue arrestado el 9 de mayo, pero ya se han retirado los cargos en su contra. Los tres congresistas intentaban proteger a Baraka.