Titulares11 de junio de 2020

El número de casos confirmados de coronavirus en Estados Unidos ha superado oficialmente los dos millones, la cifra más alta registrada en el mundo por lejos. No obstante, funcionarios de salud pública del país afirman que el verdadero número de contagios es seguramente mucho mayor. Oficialmente, el número de víctimas fatales en Estados Unidos se aproxima a 113.000 y al menos 12 estados reportan un aumento en la cantidad de hospitalizaciones por COVID-19.

En el estado de Arizona, donde las órdenes de quedarse en casa fueron levantadas el 15 de mayo, más de tres cuartas partes de las unidades de cuidados intensivos del estado se encuentran ocupadas en medio de un aumento en el número de pacientes con COVID-19. Funcionarios de salud exhortan a que se tomen nuevas medidas de distanciamiento social y advierten al gobernador que prepare inmediatamente hospitales de campaña para abordar una próxima oleada de nuevos pacientes.

El equipo de trabajo sobre coronavirus de la Casa Blanca no ha realizado una conferencia de prensa diaria en más de un mes, a pesar de que cada día entre 800 y 1.000 personas fallecen de COVID-19 en Estados Unidos. El miércoles, el vicepresidente Mike Pence, presidente del equipo de trabajo sobre coronavirus, tuiteó —y posteriormente eliminó— una fotografía de sí mismo saludando a docenas de empleados del equipo de campaña electoral de Donald Trump para las elecciones de 2020. La imagen muestra que la personas estaban amontonadas, en un espacio cerrado y sin tapabocas, en contravención de las pautas establecidas por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades para detener la propagación del coronavirus.

Un nuevo estudio realizado por investigadores del Reino Unido revela que el uso de tapabocas por toda la población podría ayudar a reducir las tasas de transmisión del coronavirus a niveles controlables. Richard Stutt, investigador de la Universidad de Cambridge y coautor del informe, sostuvo: “Nuestros análisis respaldan la adopción inmediata y universal de tapabocas por parte del público”.

Un exasesor del Gobierno británico afirmó el miércoles que el Reino Unido podría haber reducido a la mitad el número de muertes por coronavirus registrado en el país si el Gobierno hubiera impuesto medidas de confinamiento solo una semana antes.

Los casos de coronavirus continúan aumentando en el hemisferio sur. La Organización Mundial de la Salud instó a Pakistán a volver a imponer medidas de confinamiento para frenar la propagación del virus. Esto ocurre al tiempo que India ha reportado casi 10.000 nuevos casos en las últimas 24 horas, lo que representa la mayor cifra registrada en un día en el país. Indonesia ha reportado niveles récord de nuevos casos en los últimos dos días. Mientras tanto, en Brasil, donde el número de víctimas fatales es cercano a 40.000, numerosas ciudades están levantando las restricciones impuestas, aun cuando las muertes por COVID-19 continúan aumentando. El miércoles, el estado de São Paulo registró 340 muertes, alcanzando un nuevo récord diario. En África, el número de casos confirmados ha superado los 200.000.

En el Capitolio estadounidense, el hermano de George Floyd, cuya muerte a manos de agentes de policía de la ciudad de Minneapolis provocó un levantamiento global, exigió a los legisladores que actúen para impedir que se produzcan más muertes a manos de la policía. Philonise Floyd viajó el miércoles a Washington D.C., para dirigirse personalmente al Comité Judicial de la Cámara de Representantes.

Philonise Floyd sostuvo: “La gente que marcha por las calles les está diciendo ‘ya es suficiente’. El mundo necesita que los líderes de nuestro país hagan lo correcto. El pueblo los eligió para hablar por ellos, para generar un cambio positivo. El nombre de George significa algo. Hoy tienen la oportunidad de hacer que sus nombres signifiquen algo también. Si su muerte termina cambiando el mundo para mejor, y creo que lo hará, entonces él murió como vivió. Depende de ustedes asegurarse de que su muerte no sea en vano”.

El testimonio de Philonise Floyd tuvo lugar un día después de que su hermano fuera sepultado y dos días después de que legisladores demócratas dieran a conocer la Ley de Justicia en la Vigilancia Policial. De ser aprobada, dicha ley prohibiría las llaves de estrangulamiento y las órdenes de allanamiento que permiten a los agentes ingresar a una propiedad sin dar un aviso previo o tocar la puerta. Asimismo, la legislación crearía un registro nacional para hacer un seguimiento de casos de conductas indebidas.

Cada vez son más las peticiones para que se arreste a los agentes de policía de Louisville, en el estado de Kentucky, implicados en la muerte de Breonna Taylor, la afroestadounidense de 26 años de edad que murió tras ser baleada por la policía en su propio apartamento en marzo. El miércoles, el Departamento de Policía finalmente publicó su informe del incidente de esa noche, pero el informe está casi totalmente en blanco. El documento indica que Taylor no tuvo “ninguna” lesión, a pesar de que recibió ocho disparos. El informe afirma que la policía no forzó la entrada, aunque los oficiales usaron un ariete para derribar su puerta.

Mientras tanto, la Policía de Louisville está investigando acusaciones de agresión sexual contra Brett Hankison, uno de los oficiales que le disparó a Taylor. Dos mujeres han afirmado que las agredió sexualmente después de llevarlas a su casa en su vehículo policial.

Las protestas contra el racismo y la brutalidad policial continúan en todo Estados Unidos y el mundo. En Washington D.C., cientos de personas marcharon desde la Casa Blanca hasta el Monumento a Lincoln el miércoles cantando “¡Sin justicia, no hay paz! No a la Policía racista”. En la ciudad de Boston, Coalition of Black Youth (Coalición de Jóvenes Negros, en español) impulsó una manifestación masiva en las afueras de la Alcaldía para exigir un recorte de fondos al Departamento de Policía.

En el área de la bahía de San Francisco, los activistas exigen que los distritos escolares cancelen los contratos con los departamentos de Policía locales. Esta es Jackie Byers, directora de la organización Black Organizing Project (Proyecto para Organizar a la Comunidad Negra, en español), hablando en una marcha en la ciudad de Oakland el miércoles.

Jackie Byers dijo: “No queremos policías en las escuelas. Queremos maestros. Queremos bibliotecarios. Queremos salud pública. Queremos enfermeros. Queremos programas de arte. Queremos estudios étnicos”.

Monumentos a racistas, colonizadores y líderes y militares confederados continúan cayendo en todo Estados Unidos y en el mundo. En la ciudad de Saint Paul, en el estado de Minnesota, el miércoles, activistas del Movimiento Indígena Estadounidense ataron una cuerda alrededor de una estatua de Cristóbal Colón y la arrancaron del pedestal en la explanada del Capitolio del estado. Los miembros del movimiento realizaron luego una ceremonia sobre el monumento caído.

En el estado de Massachusetts, las autoridades dijeron que retirarán una estatua de Colón de un parque en el barrio de North End de Boston, luego de que manifestantes la decapitaran durante la madrugada del miércoles.

En la ciudad de Richmond, en el estado de Virginia, manifestantes derribaron el miércoles por la noche una estatua de Jefferson Davis, quien fue el presidente de los estados confederados, de la Avenida de los Monumentos.

En la cercana ciudad de Portsmouth, manifestantes usaron mazos para destruir un monumento a los soldados confederados. Una persona sufrió una lesión grave y fue hospitalizada después de que una estatua cayera sobre su cabeza.

En Washington D.C., la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, exigió el miércoles junto a otros legisladores que sean removidas 11 estatuas confederadas de la Galería Nacional de las Estatuas en el Capitolio.

El presidente Trump dijo que su Gobierno “ni siquiera consideraría” renombrar las bases del Ejército de Estados Unidos que llevan el nombre de oficiales militares confederados. Hay diez bases de este tipo, todas ellas en los estados del sur. Trump tuiteó el miércoles: “Estas bases monumentales y muy poderosas se han transformado en parte de una gran herencia estadounidense y en una historia de victoria y libertad”. El mensaje en Twitter de Trump contradijo al secretario de Defensa, Mark Esper, y al presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, quienes sugirieron que estaban dispuestos a discutir el cambio de nombre de las bases.

El presidente Trump ha anunciado que realizará su primer mitin de campaña desde marzo en la ciudad de Tulsa, en el estado de Oklahoma, el 19 de junio, un día muy simbólico. Fue el 19 de junio de 1865 que los africanos esclavizados en el estado de Texas se enteraron por primera vez de que eran libres, dos años después de que Abraham Lincoln firmara la Proclamación de Emancipación. La fecha se conmemora en la actualidad como el Día de la Libertad de Juneteenth.

Tulsa conmemoró recientemente el aniversario número 99 de una de las peores masacres de afroestadounidenses en la historia de Estados Unidos. En 1921, una horda de blancos mató a unas 300 personas, la mayoría de ellas negras, después de que un hombre negro fuera acusado de agredir a una ascensorista blanca. La multitud de blancos destruyó un distrito de prósperos comerciantes afroestadounidenses conocido en ese momento como el Wall Street Negro de Estados Unidos.

Stephen Miller, principal asesor de la Casa Blanca, estaría redactando un discurso sobre las relaciones raciales en Estados Unidos para que pronuncie el presidente Donald Trump, según reportes. En noviembre de 2019, la organización de defensa de los derechos civiles Southern Poverty Law Center (Centro Legal para la Pobreza Sureña, en español) filtró correos electrónicos de Miller que demostraban su larga trayectoria de apoyo al nacionalismo blanco, a ideas de extrema derecha y a teorías de conspiración racistas. Miller, quien fue coautor del discurso pronunciado por Trump al asumir la presidencia, es el creador de las políticas inmigratorias de tolerancia cero aplicadas por Trump, entre ellas la separación de familias.

La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y otras agrupaciones demandaron al Gobierno de Trump por el cierre de la frontera sur de Estados Unidos durante la pandemia de coronavirus. La demanda fue entablada en representación de un joven hondureño de 16 años de edad que huyó de su hogar en procura de un lugar seguro para vivir.

En otras noticias sobre inmigración, un juez federal ha impedido que agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas intercepten y arresten inmigrantes en tribunales de Nueva York. Por otra parte, el medio The Intercept informa que el Servicio de Inmigración pretende destinar 18 millones de dólares a la compra de pistolas eléctricas.

HBO Max eliminó provisoriamente la película “Lo que el viento se llevó” de su servicio de streaming de video. El periódico The Washington Post informa que la compañía propietaria de HBO, Warner Media, planea que el éxito de Hollywood de 1939 esté disponible nuevamente la semana próxima, luego de agregarle una nueva introducción realizada por un especialista en estudios afroestadounidenses cuya identidad aún no ha sido revelada. “Lo que el viento se llevó” fue retirada del sitio de internet pocas horas después de que el guionista John Ridley, quien ganó un premio Oscar por “12 años de esclavitud”, escribiera en un artículo de opinión publicado en el periódico Los Angeles Times: “Es una película que glorifica el sur del país anterior a la Guerra de Secesión. Es una película que, cuando no está ignorando los horrores de la esclavitud, está haciendo una pausa solo para perpetuar algunos de los más dolorosos estereotipos de las personas de color”.

El presidente Trump ha elogiado “Lo que el viento se llevó” en reiteradas oportunidades. Las siguientes son palabras pronunciadas por Trump durante un acto de campaña realizado en Las Vegas a fines de febrero.

El presidente Donald Trump expresó: “¿Qué sucedió con ‘Lo que el viento se llevó’? Esa hermosa película. Con Vivian Leigh y Clark Gable, ¿cierto? ¿Qué sucedió? Que vuelva ‘Lo que el viento se llevó’”.

El canal A&E canceló “Live PD”, su popular reality show de televisión sobre policías, en medio de las protestas por el rol del programa en la muerte de un conductor afroestadounidense a manos de la policía. Javier Ambler murió en marzo de 2019 después de que la Policía de Austin, la capital del estado de Texas, lo atacara repetidamente con una pistola eléctrica durante una inspección de tráfico, mientras Ambler les decía a los oficiales: “Tengo insuficiencia cardíaca congestiva” y “no puedo respirar”. Ambler fue detenido después de que supuestamente no bajara los faros a los vehículos que venía en dirección contraria. La muerte de Ambler fue filmada por un equipo de cámaras de “Live PD”, pero las tomas nunca fueron publicadas. El martes, el periódico Austin American-Statesman informó que los productores del programa destruyeron las imágenes.

Manifestantes de la zona de la Bahía de San Francisco exigen justicia para Erik Salgado, un residente de East Oakland de 23 años de edad que murió baleado el sábado en la noche por agentes de la Policía de Tránsito de California. La Policía alega que Salgado intentó embestir sus patrulleros durante una detención de tránsito. Familiares afirman que los agentes efectuaron 40 disparos indiscriminadamente contra el vehículo de Salgado, lo que provocó su muerte y heridas de gravedad a su novia Brianna Colombo, quien está embarazada. Según se ha informado, ambos ocupantes del vehículo estaban desarmados. Manifestantes exigen que se revele la identidad de los agentes involucrados y que sean llevados ante la Justicia.

Amazon impuso una moratoria de un año al uso por parte de la Policía de su programa de reconocimiento facial, tras protestas de defensores de los derechos civiles y la privacidad. A principios de esta semana, IBM anunció que se retiraría por completo del negocio de tecnología de reconocimiento facial. En una carta dirigida al Congreso de Estados Unidos, Arvind Krishna, director ejecutivo de IBM, condenó aquellos programas informáticos que puedan ser utilizados para “vigilancia masiva, discriminación por perfil racial [y] violaciones a los derechos humanos y a la libertad”. Investigadores descubrieron que los programas informáticos de reconocimiento facial tienen más probabilidades de identificar erróneamente a personas de piel más oscura.

En Estados Unidos, NASCAR, la Asociación Nacional de Carreras de Automóviles, prohibió la exhibición de banderas confederadas en sus eventos, en los que el símbolo de la supremacía blanca ha sido algo habitual a lo largo del tiempo. La medida tuvo lugar solo dos días después de que el único automovilista afroestadounidense destacado de NASCA Bubba Wallace realizara el siguiente comentario en CNN.

Bubba Wallace expresó: “Nadie debería sentirse incómodo cuando viene a una carrera de la NASCAR. Lo primero son las banderas confederadas. Sáquenlas de ahí. No tienen nada que hacer ahí”.

Esta semana, Wallace usó una camiseta en la que se podía leer: “No puedo respirar” mientras estrenaba un nuevo diseño de pintura en su automóvil: todo negro, con la etiqueta “BlackLivesMatter” (Las Vidas Negras Importan, en español) pintada a los costados.