En Chile, cientos de manifestantes salieron a las calles el viernes en respuesta a la muerte de un malabarista callejero a causa de los disparos efectuados por la policía en la ciudad sureña de Panguipulli. Los manifestantes incendiaron diez edificios públicos, incluida la sede del Gobierno municipal. Según se informa, el artista callejero, Francisco Martínez, se había negado a cumplir las órdenes de mostrarle su identificación a la policía antes de que le dispararan. Martínez estaba desarmado y solo llevaba consigo los elementos para hacer malabarismo. El sábado, sus seres queridos le rindieron homenaje y pidieron el fin de la brutalidad policial.
Adriana Seguel: “No quiero más locura. No quiero más asesinatos. No quiero que sigan matando jóvenes y que no haya justicia. Muchos jóvenes han sido asesinados y han sufrido violaciones y no hay justicia”.
Las protestas por la muerte de Martínez también se desataron en la capital, Santiago, al tiempo que continúan los llamados en todo el país a que se lleve a cabo una reforma policial.