En Estados Unidos, el juez federal de distrito Charles Breyer ha dictaminado que el Gobierno de Trump violó la ley al desplegar en junio la Guardia Nacional en la ciudad de Los Ángeles para reprimir las protestas contra las redadas de inmigración. Breyer expresó su preocupación de que, al desplegar la Guardia Nacional, el Gobierno estadounidense esté “creando una fuerza policial nacional con el presidente como su jefe”.
El fallo se produce luego de que el presidente Trump respondiera: “Vamos a ir”, cuando se le preguntó sobre el despliegue de efectivos federales en las ciudades de Chicago y Baltimore. En repetidas ocasiones, el mandatario estadounidense calificó a ambas ciudades de “infierno”.
El gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, se unió el martes a funcionarios de Chicago al reiterar su oposición a la presencia de efectivos federales en la ciudad.
Gobernador J.B. Pritzker: “Trump y su equipo buscarán cualquier excusa para desplegar militares en servicio activo en nuestras calles, presuntamente para proteger al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Tenemos motivos para creer que el Gobierno de Trump ya ha iniciado los preparativos para desplegar la Guardia Nacional de Texas en Illinois”.
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